"Hay algo ahí fuera. Algo espantoso que hace que la gente enloquezca y se suicide ante su sola visión. Nadie sabe qué es ni de dónde viene.
Cinco años después de que diera comienzo la pesadilla, los supervivientes viven refugiados en el interior de casas y edificios, protegidos por puertas cerradas y ventanas con las cortinas echadas.
Malorie, que ha conseguido sobrevivir en una casa abandonada donde tuvo a sus dos hijos, decide renunciar a la seguridad de su refugio para emprender un viaje por el río hacia un lugar mejor. En esta peligrosa odisea a ciegas Malorie sólo podrá confiar en su instinto y en el entrenado oído de los niños, que no tardarán en descubrir que algo les sigue, pero ¿qué es?"
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- Título original: Bird box.
- Autor: Josh Malerman.
- Nº de páginas: 284.
- Ediciones minotauro.
- Nota: 5 de 5.
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Llevaba años detrás de este libro sin poder conseguirlo en ningún lado, y cuando me enteré de que lo iban a reeditar y darle una segunda oportunidad en cierto modo gracias a su adaptación de Netflix no dudé ni un segundo: necesitaba hacerme con él.
A ciegas nos cuenta la historia de Malorie, una joven de 24 años (si no mal recuerdo), que descubre que está embarazada en medio de una gran crisis mundial. Hace semanas empezaron a aparecer en las noticias casos tremendamente desagradables de gente que, de pronto, se volvían super violentos, atacaban a la gente de su alrededor y terminaban suicidándose. Este tipo de catástrofes parecen tener algo en común: las víctimas, antes de volverse locas, ven algo. Pero ¿qué? nadie ha sobrevivido para contarlo.
Con esta premisa taaaan interesante comienza A ciegas, un thriller lleno de tensión que es sumamente adictivo. Está narrado en capítulos muy cortos en tercera persona pero en presente, lo que no es algo muy habitual y me resultó curioso. A su vez estos capítulos se van turnando para mostrarnos el pasado, el inicio de la historia, cuando Malorie se reúne con una serie de desconocidos supervivientes para intentar seguir adelante; y por otro lado el presente, el viaje de Malorie junto a sus hijos por el río en busca de un lugar mejor y todo el rato con los ojos vendados, completamente a ciegas. Ambas historias, tanto la del pasado como la del presente, tienen como ya he dicho muchísima tensión, el hecho de que nadie pueda abrir los ojos, de no saber qué es exactamente lo que hay ahí fuera, de tenerlo incluso a escasos centímetros sin obtener ninguna explicación... En un principio puede parecer que en un periodo tan corto de tiempo no puede haber mucha acción pero realmente no dejan de ocurrir cosas en todo el libro, lo que hace que no puedas soltarlo en ningún momento, os prometo que no podía parar de leerlo.
El libro está catalogado como terror, pero personalmente me ha parecido más bien un thriller sangriento (muy sangriento en ocasiones), pero no realmente terror. Soy muy miedica y casi todo me impide dormir por las noches, pero este libro no lo ha hecho, y para mi es un punto a favor porque he podido así disfrutar mucho más y en ningún momento me ha parecido que le faltasen tonos oscuros porque tiene de todo: Suspense, ciencia ficción, sangre, buenos personajes... El autor consigue meterte por completo en la historia. Se podría decir que la narración en cierto modo no es detallada, pero eso simplemente hace que sea más real, porque en un mundo donde estás constantemente alerta y en cierto estado de pánico es normal que no te fijes demasiado en tus propios sentimientos.
Los personajes me han gustado mucho, todos los inquilinos del refugio donde comienza el viaje de Malorie han sido especiales, todos han aportado algo a la historia y me han parecido muy bien dibujados. Al principio reconozco que Malorie me ponía un poco nerviosa porque no hacía absolutamente nada, solo se dejaba llevar y guiar por otros, pero finalmente supera el shock y toma las riendas. Me ha gustado también que no haya una historia de amor de esas que tienen que colarte por todos lados, aunque sí se aprecia la admiración y el apoyo entre personajes.
El final no ha sido del todo de mi agrado porque no me gustan mucho los finales abiertos y este me lo ha parecido un poco, pero eso es ya cuestión de gustos. He sentido que el autor no terminaba de arriesgarse porque un final muy cerrado en este libro quizá es cierto que habría creado lagunas, pero me habría gustado saber un poco más sobre el por qué de las cosas. Las últimas páginas me estaban haciendo revolverme en el sofá de la rabia y quería pegarle a cierto personaje maldito que aparece hacia el final.
En conclusión, A ciegas ha merecido completamente la pena. Es un libro finito que se devora en nada y que te tiene en tensión todo el rato, creo que podría gustar tanto a amantes de "terror" o thriller como a los de ciencia ficción. Además tiene película en Netflix que ha salido a mediados de Diciembre y os dejo aquí el trailer.
Mil gracias a la editorial por el ejemplar.
5/5
